Por un fútbol legal y honesto, STOP CORRUPCIÓN

La corrupción parece haber llegado a los campos de fútbol. Últimamente están sonando numerosos rumores que apuntan a una posible compra de partidos en la Liga BBVA, con consecuencias directas en la clasificación.
Equipos en zonas de descenso o en zonas bajas de la tabla, consiguen buenos resultados e incluso victorias contundentes frente a equipos que están colocados en posiciones mucho más elevadas, con una buena fama nacional e internacional debido a su estilo de juego y a una temporada a sus espaldas que justifica esa posición.
Los medios de comunicación han filtrado varios nombres de jugadores que habrían aceptado "dejarse ganar" para recibir una compensación económica. Estos jugadores llevan ya una buena parte de su vida dedicándose al fútbol, son jugadores con experiencia y con influencia dentro de su club.
Pero ojo, en este caso estamos hablando de jugadores, no de los árbitros. Los árbitros han sido siempre el centro de atención, debido a que dependiendo de sus decisiones, influía de una manera o de otra el transcurso del partido. La polémica sobre las decisiones de los árbitros es parte del fútbol, debido a que una persona o un grupo de personas toman decisiones rápidamente y sin opción de ver una repetición que les pudiera aclarar la duda. Tertulianos deportivos, sin ningún tipo de presión, necesitan ver varias repeticiones desde varios ángulos para obtener un veredicto y criticar (o elogiar) la actuación arbitral.
La posible estafa que se ha destapado últimamente, tiene a los jugadores como protagonistas. Los equipos con déficit de puntos, apalabran con jugadores de algún equipo que está en una posición en la clasificación más cómoda, que no disputen el partido con intención de ganarlo y que si es posible, cometan algún tipo de fallo, que beneficie al equipo necesitado.

La LFP a la cabeza, con el comité anticorrupción como brazo ejecutor, tiene que poner tierra de por medio en este asunto, debido a que el amaño de partidos es una práctica ilegal y discriminatoria.
El fútbol es un deporte para entretener al espectador, además de para generar negocio. Con el amaño de partidos están jugando con la ilusión de la gente que va al campo con intención de ver ganar (o de ver  jugar bien) a su equipo, y ven como sus jugadores están desganados y pasan olímpicamente del escudo, de la camiseta, de los valores del club, de la ciudad.
Unámonos contra el amaño de partidos, luchemos todos los aficionados a este deporte para que el dinero se quede en las oficinas y no baje al terreno de juego.